Nuria Flames Bonilla
Estudió Biología en la Universidad de Valencia. Realizó su tesis doctoral con Oscar Marín en el Instituto de Neurociencias de Alicante.
Tras acabar la tesis doctoral se mudó a Nueva York, al laboratorio de Oliver Hobert, donde conoció y se enamoró del modelo animal C. elegans, un pequeño gusano con neuronas muy parecidas a las nuestras, y del cual no se ha separado desde entonces.
Tras seis años fuera, volvió a Valencia a empezar su propio grupo financiada por una ERC-Starting Grant. En su laboratorio intentan desentrañar los mecanismos que dirigen la generación de los cientos de neuronas diferentes que existen en nuestro cerebro. Recientemente les han concedido un ERC-Consolidator Grant para proseguir con sus investigaciones. Desde que empezó su propio grupo ha tenido dos hijas, que tienen ahora 9 y 7 años.